¿Puede un niño pequeño experimentar cambios en su patrón de sueño? Sí, suele pasarle a un gran porcentaje de bebés y, aunque los patrones de sueño varían considerablemente, como lo mencionaría una asesora del sueño infantil, es importante estar atentos a ciertas dificultades que pueden indicar trastornos del sueño en niños de 1 a 2 años.
En este especial de Web de Profesionales te explicamos algunas de las dificultades más frecuentes para dormirse o mantener un sueño constante en niños pequeños.
Contenidos
Los trastornos del sueño en niños de 1 a 2 años más comunes
Dificultad para iniciar o mantener el sueño
En lugar de hablar de “insomnio” como en adultos, en esta edad podemos observar una resistencia marcada y persistente a la hora de acostarse. Esto puede manifestarse en llantos prolongados, levantarse repetidamente de la cuna o buscar activamente la atención de los padres durante un tiempo excesivo después de haber sido acostados. También es común observar despertares nocturnos frecuentes con dificultad para volver a dormirse sin intervención de los padres.
Apnea del sueño
La apnea del sueño es otro de los trastornos del sueño en niños de 1 a 2 años caracterizado por pausas en la respiración durante el sueño. Los síntomas van desde ronquidos fuertes interrumpidos por silencios, hasta jadeos o resoplidos al retomar la respiración.
Parasomnias
Dentro de los trastornos del sueño en niños de 1 a 2 años es posible destacar conductas inusuales llamadas parasomnias. Las más comunes incluyen:
- Despertares confusos: donde los pequeños despiertan parcialmente, mostrando desorientación, agitación y dificultad para reconocer a sus cuidadores.
- Sonambulismo: muy poco frecuentes, pero sí son otro trastorno que se manifiesta con el peque levantándose y caminando dormido. Es crucial garantizar un entorno seguro para prevenir accidentes.
- Movimientos rítmicos relacionados con el sueño: aquí abarcamos conductas repetitivas como golpear la cabeza contra la cuna o balancear el cuerpo antes de dormirse o durante la noche.
- Alteraciones del ritmo circadiano: esta última parasomnia se manifiesta al experimentar dificultades para adaptarse a horarios de sueño regulares. Esto debido a factores como la inconsistencia en las rutinas, la exposición excesiva a pantallas antes de dormir o viajes con cambios de zona horaria.
Algo clave a destacar en los trastornos del sueño en niños de 1 a 2 años es que estos pueden ser transitorios, pero, al notar patrones persistentes que afecten al menor, es recomendable consultar con un especialista para una evaluación adecuada y descartar cualquier problema subyacente.
Algunos tratamientos para los trastornos de sueño en niños de 1 a 2 años
Ahora bien, ¿cuáles son las recomendaciones de los expertos para abordar el desafío que representa un trastorno de sueño en infantes? Hay varios a destacar:
- La terapia conductual puede ser una herramienta valiosa. Esta se enfoca a emplear técnicas como el entrenamiento de relajación adaptado a la edad y el refuerzo positivo de las conductas de sueño deseadas.
- Fomentar una buena higiene del sueño es crucial, que implica crear un ambiente propicio para el descanso y reducir al máximo la estimulación previa al sueño.
- Establecer una rutina de sueño regular y predecible es una estrategia poderosa. Al repetir las mismas actividades en el mismo orden cada noche, como un baño tibio, la lectura de un cuento y una canción de cuna, los niños aprenden a anticipar la hora de dormir y a relajarse.

Como vemos, aunque la posibilidad de estos trastornos está presente en la realidad de muchos niños y niñas de entre 1 a 2 años, la acción temprana puede ayudar a superar de manera efectiva la misma. Web de Profesionales te aconseja siempre consultar con un pediatra para una evaluación adecuada y encontrar la orientación adecuada sobre higiene del sueño.